Viernes, 7 de agosto de 2020. Pico Trugberg 3.879 m, cima"de invierno" que he alcanzado por el glaciar, agrietado, de la cara este. Tres horas desde el refugio del Monch. En la bajada, engañado por el amable aspecto del Walcherhorn (grietas camufladas por la reciente nevada) pasé del miedo a experimentar el pánico...
Aletchshorn 4.194 m. Impresionante. Vista desde el Trugberg.
De regreso al refugio después de mi ascensión solitaria al Truhberg (Cima alcanzada, en rojo) 3.879 m, que precisa sortear unas cuantas grietas de gran tamaño, y otras más pequeñas, pero más peligrosas, en la arista final. La cima principal 3.932 m está justo al norte, en el campo de nieve. Pero necesitaba mi tiempo y energías para encontrar la ruta de bajada. El Trugberg me pareció más exigente que el Monch.
Vista del Trugberg desde Jungfraujoch. La cima principal está un poco al norte de la "cima de invierno 3.879 m" que yo ascendí en solitario. Magnífica montaña que nadie debe ascender en solitario debido a su gran peligrosidad (grietas de diversos calibres, profundidad y mimetización), debido a que a veces estás encima de una y no la ves...
Leticia, refugio Monchsjoch hutte, una estupenda guarda, amable y generosa.
Stephanie me recomendó encarecidamente que no intentara ascender la Jungfrau sin guía. Al final le hice caso. Gracias Stephanie.
Jean, trabajador del refugio y experto alpinista. Me trató como a un amigo y refrenó mis impulsos de partir sólo por los glaciares. Además decidió invitarme a las dos copas de vino, diarias, durante ocho días, que me tomé durante mi estancia. ¡Eso es amistad, Jean! Volveré a la Jungfrau y te llevaré una botella de vino!
No hay comentarios:
Publicar un comentario