Bifurcación Sieste-La Valle (Boltaña) el sector Nordeste de la Sierra de Guara. Tomamos la dirección Condado de San Martin caminando por una carreterita hasta un aparcamiento donde cruzaremos el río Sieste. 19 de noviembre de 2024. Toño y Jesús. Nos acompaña la perrita Chucky. Seguiremos las señales que indican Pozas de San Martin y San Belian y Morcat. Los senderos están bien marcados y señalizados.
Estratos en la margen derecha orográfica del río Sieste.
Afloramiento geológico. Margas y estratos calcáreos.
Bellísimas pozas en el río Sieste.
Ampliar imagen haciendo click.
Sendero en ascenso, bien trazado. Bifurcaciones señalizadas.
Seguimos hacia Morcat. Amplio camino. Luego pista.
Atajo por sendero. Árboles centenarios.
Morcat (900 m) es el más destacado promontorio con las mejores panorámicas de toda la Sierra de Guara: Pirineos, Peña Montañesa, Embalse de Mediano, Puerto del Serrablo y Sierra del Galardón. Morcat es una encrucijada de caminos, una atalaya privilegiada en un entorno de robles y encinas centenarias. Morcat es de visita imprescindible.
Fuente junto al camino.
La pista de descenso atraviesa bancales de pinos tratados con silvicultura.
LLegamos a Sieste después de casi seis horas de excursión. Iremos a comer a un restaurante de Aínsa aprovechando para repartir medio centenar de octavillas contra el proyecto de la carretera turística entre Bara y Las Bellostas.
LA REFLEXIÓN DE TOÑO RAPÚN
La SIERRA DE GUARA es, sin ninguna duda, uno de los lugares más idóneos y hermosos para practicar el senderismo. Desde que hace unos años comenzamos a patear este rincón de nuestra geografía no hemos parado de encontrar y disfrutar de los inmensos y diversos paisajes que la NATURALEZA ha puesto a nuestra disposición en esta bendita sierra.
El martes 19 de este mes de noviembre, Jesús y yo, decidimos realizar una circular por el noreste de Guara. Partiendo desde SIESTE, recorriendo unas sendas que nos llevarían a lugares mágicos, y terminando de nuevo en SIESTE.
Primero recorrimos unos km por asfalto hasta llegar a un desvío que nos llevaría, cruzando el río, hacia LAS POZAS DE SAN MARTÍN. Se trata de unas preciosas badinas, de aguas verde esmeralda, que invitan a sumergirse en ellas y que son el reclamo de muchos bañistas en verano. Un cartel indica la dirección a seguir para llegar a la CASCADA DEL CONFESIONARIO, llamada así por la forma que le confiere la oquedad envuelta por la piedra. Los chorros que forman la cascada, y la sugerente forma de la piedra que hay encima, llevó a denominarla popularmente como "los chorros del coño del mundo". La imaginación es libre.
Nosotros seguimos la senda principal que, en un continuo pero fácil ascenso, nos ofrecía una gran variedad de flora autóctona. Nuestro objetivo era llegar a MORCAT, un pueblo deshabitado, y cargado de magia. Para llegar hasta él, hicimos una variante para poder ver otro pueblo, también deshabitado, y de nombre SAN VELIÁN, situado en un altozano, de terreno escabroso, por encima del barranco de SIESTE. Desde este pueblo, y a través de una senda preciosa, llegamos a MORCAT. Y aquí, en MORCAT, con sus casas escalonadas, quedamos extasiados. Situado en la cima de un monte, encima del barranco de SIESTE, es un espectador privilegiado con una vista de 360 grados y que alcanza hasta el PIRINEO CENTRAL. Jesús y yo coincidimos en darle la calificación del MEJOR MIRADOR DE LA SIERRA DE GUARA. Pero no se queda sólo en las vistas excepcionales que tiene, sino que tiene algo más y muy importante, es un LUGAR TELÚRICO, cargado de energía positiva y que sin duda tuvo que marcar, muy intensamente y para bien, a los que tuvieron la fortuna de habitarlo. Estuvimos unos 30 minutos en MORCAT, pero sus condiciones y sus influencias intangibles nos hicieron sentir totalmente felices. MORCAT en lo alto y MIZ en la plana, son dos lugares casi sagrados que, a Jesús y a mí, nos han marcado energética y espiritualmente, y en ambos lugares, se siente intensamente un SILENCIO NUTRITIVO y mucha PAZ ESPIRITUAL.
El regreso a SIESTE para cerrar la circular fue muy tranquilo y bastante rápido. Como de costumbre, al final de esta deliciosa aventura, nos bañamos en el RÍO SIESTE, comimos un poco en AINSA, y regresamos a casa con la sensación de haber estado en una de las mejores atalayas de la SIERRA DE GUARA.
Circular totalmente recomendable
TOÑO RAPÚN (22 - 11 - 24)
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