lunes, 11 de marzo de 2019

PEÑA TELERA. CORONA DEL MALLO 2.541 m. CORREDOR DEL ARCO DE PIEDRA Y CRESTA ORIENTAL


Félix Escobar, del Club Montaña Pirineos (Zaragoza) se dispone a superar el último obstáculo del Corredor del Arco de Piedra en la cara norte del Corona del Mallo (Peña Telera) donde habrá de moverse con cautela para superar la placa de nieve helada que se le ha partido a Jesús Vallés precipitándolo en una caída de casi 20 metros. 8 de marzo de 2019. Ampliar las fotos haciendo click. ¡Los tres estamos ilesos!

Hemos sacado las cuerdas e instalado una reunión. Félix consigue asegurar el pasaje difícil (IV, mixto) aunque tuvo que apoyarse en la placa de viento.

¡Y lo supera!



RELATO DE FÉLIX ESCOBAR

En rojo itinerario corredor y cresta.


CORONA DEL MALLO
8 de marzo 2019
Ya hacía más de un año que no coincidía para ir a la montaña con Jesús, este viernes, mi viaje relámpago desde Sevilla obra el milagro y me propone un corredor/canal que saliendo desde las cercanías del Arco Tectónico de Piedrafita, sube hasta la cresta Este de Corona del Mallo, que con 2.541 metros supone ser el hermano pequeño de Telera. Su amiga Marisa, fuerte montañera de Jaca, nos acompañará.
Ponemos crampones y piolet en el nevero de base de la Canal, que en el mapa de Alpina denominan “Canal del Burro”, Jesús prefiere llamarlo corredor del Arco, pero realmente debería ser de los Arcos de Piedra, pues conecta el de abajo con el que está en la cresta de Corona del Mallo, la pendiente se va incrementando paulatinamente….
Unos doscientos y pico metros de fácil canal nevada, entre 25 y 45º, amistosa en su textura, aunque algunas costras nos hacen esforzarnos más pero, ¿a qué hemos venido si no? El Pireneísmo Invernal no se regala….
Llegando al gran paredón que limita la Canal se aprecia una mayor acumulación de nieve, tal que al ir a introducirnos en el resalte que lo libera, nos hunde hasta la cintura. Jesús logra cierta estabilidad y supera el primer estrechamiento. Detrás voy yo y Marisa aprovecha nuestras huellas. Nieve helada en su salida, pendiente sobre 60º.
Jesús se muestra a tope de motivación y fortaleza, y se dirige raudo a por el segundo resalte, que supondrá la salida a las campas de nieve superiores. A lo que pisa con firmeza para crear huella en la costra, una placa de viento se desprende y cual surfero nival lo precipita hacia abajo. No hacía ni un segundo que le había hecho una foto con el móvil y estaba recogiéndolo en el bolsillo cuando me lo veo venir; me aparto y grito a Marisa que haga lo mismo, podríamos convertirnos en una croqueta de tres ejemplares humanos llenos de pinchos metálicos rebozada en nieve….
Jesús pasa a mi lado, no con gran velocidad pero sus intentos de detención no fructifican. Afortunadamente como Marisa se apartó hacia la pared, la nieve desprendida hace un efecto como de cuña y Jesús puede, por fin, parar….
Recuperados del susto y todos ilesos, procedemos a asegurar el paso para poder salir de ahí por arriba. Unos cuernos de roca proveen lugar para reunión y dos puntos de seguro que me permiten escalar el resalte con mucho cuidado, pues el corte de placa amenaza con desprender su parte superior; hay que apoyarse con suma delicadeza….
Desde arriba detecto más placas y sorteándolas puedo alcanzar otro cuerno de roca desde donde asegurar a mis compañeros, salimos a las campas de nieve y ponemos rumbo hacia la cresta este de Corona del Mallo, esto no se ha acabado todavía.
Nos deleitamos con la presencia el Arco o Ventana de Roca que dejamos a la derecha para encaramarnos a la cresta que afrontaremos con un encordamiento en ensamble; hay algunos pasos de IIº, la roca no es buena, hay nieve con cornisas y no está la cosa para tonterías…
Llegamos a la cima, abrazos, besos y fotos de obligado cumplimiento y sin pausa a deshacer el último tramo de cresta y a afrontar el descenso que todavía queda tema por delante; corredor de 50º al sur y flanqueos expuestos hacia la Forca de Cavichirizas, un rápel sorpresa y conseguimos llegar sin más novedad a este collado estratégico, salida del famoso Paso Horizontal y descenso cómodo hacia la seguridad del Ibón de Piedrafita. Los jóvenes del Equipo de Alpinismo de la Comunidad de Madrid, recién bajados de los clásicos corredores de Telera, nos acompañan hasta nuestros vehículos….
Una buena ruta, necesitaba un buen tute de Pireneísmo Auténtico para ponerme a tono, no es un corredor técnico ni se hará un clásico de Telera, los pasos de salida son fáciles, pero lo fácil también puede matarte, seamos cuidadosos y respetemos a la montaña en nuestra planificación de las actividades.
Hasta pronto Pirineo, no me he ido tan lejos...


Inicio parte empinada.

Marisa Bergua.

Corredor de salida



Superado el estrechamiento helado.


Jesús a punto de salir. Pero al traccionar con los piolets y clavar con fuerza los crampones la placa se rompe y caigo unos 20 metros.


Con precaución Félix resuelve el pasaje. Fijarse en la placa partida.


Es el turno de Marisa Bergua.


Marisa, bien asegurada, resuelve con rapidez.



Ya estamos fuera del corredor. Arco de Piedra e inicio cresta oriental.


Terreno fácil pero aéreo.


Bonita cresta. Nieve confort "al dente"



Abismo al norte.


Sección afilada.


Magnífico ambiente.

Última brecha. Marisa y Félix llegando a la cima.

Félix, Marisa y Jesús. Corona del Mallo 2.541 m (Peña Telera) y ahora toca destrepar el tramo final y descender un impresionante corredor de 200 m de desnivel en 50º, con escupidera al final. Travesía expuesta, rápel y más travesía. En Peña Telera el problema siempre está en bajar. Al conseguir detenerme cuando parte de la masa de nieve se empotró contra Marisa pensé, inmediatamente, que Félix había sido arrastrado al vacío y le pregunto por él a Marisa. Pero no,  está arriba. Cuando caí con la placa tuve la sensación de ir montado en un auto de choque, ja, ja!


3 comentarios:

  1. cansao y contento me quedé...
    Jesús, a las fiestas de Sabiñánigo nos montamos en los autos de choque, a ver qué tal....

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  2. La sensación es como si "cabalgaras" sobre el caparazón de una tortuga gigantesca. Es increíble, como si ese gran torroco de nieve tuviera vida propia...

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  3. Poco más que añadir a a crónica de Félix y Jesús, grandes montañeros. Una jornada completa en todos los aspectos, con una arista exigente, con pasos aéreos pero llevaderos. Una travesía enriquecedora para mi. Gracias por contar conmigo y no olvidar que en la montaña lo más importante es la humildad.
    Marisa Bergua

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