Fablo, 1.250 m. Encuentro con Enrique Vidania y Paco Grasa. Han venido por Espín. Van a adecentar el entorno de este pueblo abandonado y colonizado por espinos pinchosos. Nosotros venimos desde Gillué a pie (950 m) 9 de enero de 2025 Raquel, Toño y Jesús. Ampliar imágenes haciendo click.
En el extremo oeste del pueblo encontramos un camino limpio y bien trazado que desciende y atraviesa una ripa vertiginosa.
Buena señalización y llegaremos a un prado. Es la ermita de Fragen.
Dejamos atras Fragen y de repente el camino se desvía al este y pierde altura.
Ermita de Fragen. A casi una hora de Fablo. Está en ruinas. La dejamos atrás sin llegar a visitarla.
Toño va contento y animado.
Cuando llevamos casi tres horas andando aparecen unos prados con muchas sendas de vacas, pocos hitos y ninguna señal. Arriba en lo alto, justo al norte, se divisa la gran pantalla de telefónica. Erróneamente seguiremos una trocha estrecha pegada al barranco que en realidad nos está alejando de la Peña de Cancias, que queda al Este. Abandonaremos este barranco y nos meteremos monte a través en busca de un marcado collado al Este. Perderemos casi una hora por lo menos. Tramo penoso e intuitivo.
Además de nuestros perretes Chucky y Daneb. dos perros más nos vienen siguiendo desde Gillué.
Conseguimos ganar el collado y allí encontramos el camino que habíamos perdido.
Pasamos el desvío a los tejos milenarios y en la niebla nos encaramamos a la cresta de Cancias
Peña de Cancias 1.927 m. Cinco horas desde Gillué. 1.200 metros de desnivel. Ocho horas para toda la ruta circular. Tiempo frío y con fuertes vientos. Niebla densa a ráfagas.
A ciegas en la niebla crestearémos hasta la cima Este y allí emprendemos un descenso directo justo por la divisoria río Ara/río Guarga hasta llegar a un gran collado de prados y bosque. Al Sur seguiremos la margen derecha del barranco de las Tratus que baja hacia Gillué. Se debe poner cuidado y a los quince minutos, sobre una cascada importante, saltamos el arroyo para tomar una senda horizontal y luego en fuerte descenso que baja en zig zag hasta la pista que nos llevará hasta Gillué sin pasar por Fablo. Algunos árboles obstaculizan el paso.
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