viernes, 30 de mayo de 2025

PICO ARNA 2.911 m (FENIÁS OESTE)

 

Vertiente sur del Batolito de Panticosa, por sus estribaciones y laderas, encima del pueblo de Lanuza y al sur del macizo de las Argualas. Hemos iniciado la marcha desde la presa, 1.200 m, remontando una pista muy larga y en fuerte pendiente que sube a un rellano donde están las antenas de comunicaciones. Un espolón herboso con traza de paso remonta al N.E y por un sendero lateral, arriba al este, supera un escarpe rocoso donde los sarrios han vigilado nuestros movimientos. Crestear y poner pie en una cuenca de valles nevados. Oscar y Jesús, 24 de mayo de 2025. Ampliar imágenes haciendo click. Piolet y crampones. 40 º. Nieve dura temprano en la mañana.


Una vez en la cumbre del Feniás Central 2.847 m, remontamos una cresta aérea de esquisto rojo interrumpida por unos cuantos pequeños neveros, fáciles de atravesar pero arriesgados sin crampones. Abismo a los dos lados. Imprescindible un piolet. Será una media hora hasta la cima del Pico Arna (Feniás Oeste) Cinco horas desde la presa.






Feniás Oeste 2.911 m. Oscar muy contento. Detrás el Pico de las Argualas.





Aunque el señor Andoni Jáuregui Urriticoechea moriría seguramente en su cama y rodeado de sus familiares a la edad de 82 años, su hijo se ha escogido esta escarpada cumbre secundaria para instalar una placa "in memoriam". Hay que respetar ese amor filial aunque esa práctica no debería extenderse por las cumbres del Pirineo.




Al fondo el Pirineo Occidental. Valle de Tena y el Portalet.




El destrepe es sencillo pero requiere paso seguro y toda nuestra atención.



Vamos superando los pequeños escarpes y los neveritos suspendidos en el filo de la cresta en dirección al Feniás Central desde donde nos volveremos a poner los crampones para descender hasta el fondo del valle. Son mas de 1.700 m de desnivel. Subir y bajar diez horas. Un buen chaquetazo. Veinte kilómetros en total.

Oscar progresa con movimientos felinos y cuidadosos. Centro de gravedad bajo. Al fondo la Sierra de Tendeñera. Es un magnífico compañero de aventuras montañeras. Te queremos, Oscar, ja, ja!

Ruta al Feniás central y oeste. Ampliar imagen haciendo click.

lunes, 26 de mayo de 2025

RAFAEL GARRIDO, SOLDADO DE ESPAÑA. PRESENTE!

 

Un periódico irrelevante y degradado, inmerso en el mismo declive de aquella revista amarilla que intentaba conseguir clientes ofreciendo mujeres desnudas en sus portadas, manipula el humilde pero decidido proceso de denominación de un torreón calcáreo del Pirineo occidental que, superados todos los trámites y procedimientos, ya se llama por fin, Punta General Garrido, 2.248 m.

Desde que vi las fotos del atentado supe que tenía una cuenta pendiente con el hombre del jersey militar. Porque nos salvó la vida, a mi compañero y a mí, aquella tarde de finales de verano en 1983. Después de una intensa jornada de escalada en la arista oriental del Pico Lecherines y continuando por la profunda chimenea del Mallo, las cuerdas de rapel nos depositaron en el suelo, fatigados y deshidratados. La fuente bajo el Rigüelo estaba seca y aceleramos la marcha con la mala suerte de salirnos de la senda hacia unos prados por los que perdimos altura con rapidez. De repente se acabaron los prados y nos encontramos enriscados en unas fajas rocosas cada vez más verticales y difíciles de bajar. Las dos cabañas y la fuente de la Majada Alta estaban justo en nuestra vertical, pero ochenta metros más abajo. Cuando la sed te hace perder la capacidad de pensar ya no estás para instalar rápeles o asegurar tus movimientos. Intentas bajar a cualquier precio. Ya no te quedan fuerzas para subir para arriba y buscar el sendero correcto. Casi siempre estas situaciones acaban con los montañeros despeñados. Pero la Providencia quiso que junto a la fuente, un hombre y su hijo se percataran de la gravedad de nuestra situación. A voces el hombre consiguió disuadirnos de persistir en nuestro intento de destrepar el farallón. Nos hizo remontar unos metros hasta un hombro desde el que pudimos acceder a una canal oblicua que sin complicaciones nos permitió liberarnos de aquellas engañosas repisas colgadas, Aquel hombre nos salvó la vida y casi cuarenta años más tarde del atentado que acabó con su vida, me siento reconfortado por esta humilde y sencilla escalada que ahora lleva su nombre.


En la escalada.

Descenso de la Punta General Garrido.




Arista Sur-Oeste (rojo) y vía normal asegurada (amarillo)



El general Garrido, foto juvenil. Es la imagen que recuerdo más vívida. Estaba el hombre feliz junto a su hijo, después de habernos sacado de un apuro muy serio. Me pareció el hombre más guapo del mundo y ni se me pasó por la cabeza que fuera militar, aunque bromeé con él porque llevaba jersey y pantalón de color caki, aunque sin insignias. La Providencia quiso que estuviera allí para ayudarnos a encontrar la bajada.



Don Rafael Garrido: Con afecto y respeto, ese peñasco del Pirineo lleva su nombre. Se lo merece porque frecuentaba y amaba ese rincón de nuestras montañas. Su espíritu risueño y bondadoso se sentirá a gusto entre los neveros y las tormentas. La paz y el bienestar de los españoles se lo debemos a personas como usted.


Ascender la Punta General Garrido partiendo desde Canfranc Pueblo es una dura remontada de un desnivel próximo a los 1.400 m. Superar el barranco y los pinares de Gabardito hasta la Gruta Helada de Los Lecherines. Encima y a la izquierda esta la aguja, majestuosa. Casco imprescindible. Cresta afilada. Bloques inestables.

domingo, 25 de mayo de 2025

CABEZA DE GUARA 1.878 m. SOLEDAD Y PAISAJE AL ESTE DE LA SIERRA. UN EMPRESARIO DE AÍNSA COMETIÓ IRREGULARIDADES DESDE EL PATRONATO DEL PARQUE NATURAL

 

Cartel dirección Fenales que encontramos unos cuarenta minutos una vez cogido el buen camino, muy encharcado al principio, nada más comenzar la pista que arranca del aparcamiento de Used, al este y debajo de San Urbez. Recomendamos alojamientos, cafés y aperitivos en el refugio de Nocito y sus amables encargadas. 22 de mayo 2025.


Muy buen camino evitando coger la pista que da un fatigoso rodeo. Ampliar imagen haciendo click. Por esta marcada "cabañera" salimos al Este y más arriba del refugio. Seguiremos la pista que sube muy suavemente hacia el este y en una curva sale un buen camino hasta la cima de la Cabeza de Guara. Evitar tomar dirección Collado Santa Cília pues nos alejaríamos de nuestro objetivo.



Última señal indicadora. En treinta minutos estaremos en la cumbre.


Cabeza de Guara 1.878 m. Es la cima más oriental de la Sierra de Guara. Han sido cuatro horas desde el aparcamiento de Used. Por error hemos perdido más de una hora al coger la pista que da un gran giro al oeste y pasa por el refugio. Magnífica vista sobre las cuencas del Alcanadre, Mascún y Balcés. Es un Santuario Hidrológico que debemos proteger de los planes de la Diputación de Huesca que insiste en construir una innecesaria carretera asfaltada que permitiría la masificación y degradación de la zona más salvaje y deshabitada del parque natural.


Abajo están las Gorgas Negras del Alcanadre.


Nunca había subido a Cabeza de Guara 1.878 m.







En el descenso atravesamos unos extensos llanos donde se aprecian varias dolinas.

Extensos llanos de gran belleza.


Al fondo Collado de Añisclo.







Mariano, un experto alpinistas y aventurero. En este punto llegamos al descender de nuevo a la pista. La seguiremos unos minutos hasta encontrar, señalizado por tres grandes señales, el camino correcto para bajar rápidamente y sin tocar la pista hasta el aparcamiento de Used. Desde la cima se invierten unas  tres horas para bajar.

Agradecemos al Parque Natural de la Sierra de Guara la perfecta señalización y limpieza de los senderos. Un gran trabajo, sí señor. Ampliar imagen haciendo click. Regresaremos por la carretera, con muchos baches, que nos devuelve al valle del Guarga. El proyecto de la nueva carretera responde a intereses de cierto empresario que planea explotar el cuadrante Nordeste del Parque Natural. Pero la carretera sólo sería posible dinamitando los mantos de roca arenisca y masacrando a las poblaciones de anfibios y reptiles, un crimen que debemos impedir.


Peña Guara, vertiente norte.

TODO EL PATRONATO DEL PARQUE NATURAL DE GUARA VOTÓ A FAVOR DE LA DESTRUCCIÓN DE LA NATURALEZA.
QUÉ VERGÜENZA.

RESOLUCIÓN de 19 de diciembre de 2022, del Director del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental, por la que se formula declaración de impacto ambiental del Proyecto de construcción de pista forestal asfaltada entre los núcleos de Bara y Las Bellostas, en los términos municipales de Sabiñánigo, Bierge y Aínsa-Sobrarbe (Huesca), promovido por la Dirección General de Medio Natural y Gestión Forestal del Gobierno de Aragón. (Número de Expediente: INAGA 500201/01A/2021/11142).

Publicado el 21/02/2023 (Nº 35)
Sección: III. Otras Disposiciones y Acuerdos
Emisor: DEPARTAMENTO DE AGRICULTURA, GANADERÍA Y MEDIO AMBIENTE

El 19 de diciembre hubo resolución que se publicó en el BOA el 21 de febrero.
Pero a principios de noviembre, el empresario de Aínsa ya lo había anunciado como presidente del Patronato del Parque Natural de la Sierra de Guara.

miércoles, 21 de mayo de 2025

COTATUERO ORDESA. EL NEVERO QUE NO TUVE MÁS REMEDIO QUE ATRAVESAR

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 El día, no podía ser de otra manera, empezó con nervios pero todo fluyendo correctamente. La persona, desconocida para mi, que iba a llevarme a Ordesa no podía ser más interesante. Y llegó puntual. Surgió una conversación de esas que alimentan el alma. Me dejó en la pradera a las 6 de la mañana y el amanecer se estaba haciendo esperar. Nos reímos cuando dije que me daría más miedo estar sin compañía a esas horas en Barcelona que caminando por allí. Al empezar a andar entre los árboles la oscuridad era mayor todavía, aunque ya estaban los pájaros cantando a ese nuevo día que ellos saben intuir. Los nervios volvieron a aflorar cuando me dí cuenta de que me había pasado un desvío. Ya me ocurrió cuando fuimos a hacer el reconocimiento y localizar los puntos para los carteles. Jesús me dijo que fuese delante, y cuando me pasé la senda que subía a la derecha me dio el toque. Sin luz me pareció imposible encontrarla, y bendije mentalmente a quien me había enseñado a usar hacía poco la aplicación del IGM. Imposible perderse así. Cuando la senda dejó el abrigo de abedules y abetos la claridad se imponía. Al terminar la subida compartí el agua de la cascada de Carriata con los primeros sarrios que me sorprendieron a lo largo del paseo. Luego me estrené colocando un cartel. Poco antes de llegar al desvío hacia las clavijas de Buxton-Cotatuero habíamos encontrado un pequeño nevero la semana anterior. Lo cruzamos ayudados de un palo que improvisamos en el momento. Fue la primera vez que yo pasaba un nevero y me pareció fácil. Jesús iba delante, repasando la huella que había abierta, y el sol que en ese momento brillaba sobre la nieve la había convertido en una masa blanda, que te atrapaba. Cual sería mi sorpresa al llegar y verlo convertido en un tobogán de hielo que podía precipitarte a un abismo vertiginoso si cometías la torpeza de resbalar. Me acerqué y traté de clavar en la nieve helada el bastón que había llevado conmigo. Imposible. Las botas resbalaban si trataba de pisar. No había ni rastro de la sendita que la semana pasada lo cruzaba. Harían falta crampones y piolet para cruzar, y yo ni los tenia ni hubiera sabido cómo usarlos aunque los hubiera llevado. Lo que sí sabía era que quería colocar los carteles que advertían de que las clavijas de Buxton-Cotatuero iban a ser cortadas. Aunque las fajas superiores estaban todavía cubiertas de nieve y la probabilidad de que alguien fuese a hacer una ruta que las incluyese era prácticamente nula, una de las preocupaciones principales era advertir y que nadie corriera el menor riesgo. Bastante tragedia habían protagonizado ya esas clavijas desde que el acaudalado Buxton las mandó poner para emboscar a los soberbios bucardos, magníficas cabras pirenaicas que durante milenios habitaron las fajas superiores de esos impresionantes farallones. El “cazador” Buxton abrió el camino a todos los cazatrofeos que terminaron por exterminar al bucardo, utilizando las clavijas para sorprenderlos en su huida cuando eran espantados por ojeadores y perros de caza. El refugio que buscaron en las fajas de enfrente, más húmedas y umbrías y menos accesibles a los humanos, sólo sirvió para prolongar la agonía de su extinción. Afortunadamente, en mi casa el “culigán”, o desplazamiento arrastrando el culo, es deporte popular, y como el nevero al empezar a deshacerse había dejado un hueco entre la roca y la nieve, destrepé de la senda y fui avanzando bajo la nieve helada en posición sentada, utilizando manos y trasero para desplazarme por el túnel. Solo pasé miedo al llegar a la mitad del recorrido. El espacio se limitaba, la cornisa de roca se estrechaba y a mis pies había una especie de desagüe por el que cabía una persona sin problemas. No era cuestión de pensar en las consecuencias de una caída por ahí, así que presionando con los pies en la masa helada frente a mi, apretando el culo y moviendo las manos, en un periquete estaba al otro lado, dando gracias por salir con bien de la aventura. El resto fue coser y cantar. Al pie del sendero que sube a las clavijas, otro cartel. En el desvío que viene de la faja Canarellos y el bosque de las Hayas el siguiente, y a seguir disfrutando bajando hacia la pradera para terminar de colocar las señalizaciones, soñando con que somos capaces de devolver ese santuario a la naturaleza para que lo ocupe la prima hermana del bucardo, la Capra ibex, y que el delicado equilibrio del ecosistema que el Parque Nacional debe proteger se empiece a recuperar.

domingo, 18 de mayo de 2025

PARTACUA NORTE. CORREDOR DE LA ZETA A LA PEÑA TELERA 2.764 m. DESCENSO PLAN DE USABÁS PUERTO DE BIESCAS.

 

Corredor de la Z, cresta oeste hasta Peña Telera. Ampliar imagen haciendo click.



RELATO DE NACHO BUBA
Alpinista Tensino.

Miro la carretera que baja del valle buscando un coche que ya llega . Alzo la mano para que paren. Aviso a mis dos compañeros que están a refugio del sol sentados en la capilleta de Santa Elena, a los pies de la carretera. Dos bellas mujeres salen del coche sonriendo, nos abrazan y nos llevan de vuelta a Piedrafita. Vamos a buscar el otro coche y a rehidratarnos a base de vino, cerveza y torrezno.

 Unas 10 horas antes: Son las 5:40 y comienza la marcha desde mi casa, en Tramacastilla, al encuentro de dos sabiñaguenses en la pista que sube de Lacuniacha. Subo como un rayo el bosque del Betato pasando el barranco del Gorgol con la mochila cargada. Quiero llegar antes que ellos, pues si se adelantan me perderé la entretenida conversación del caminante. Salgo del bosque donde aún era de noche, pero en los prados ya ha amanecido. Atajo hasta la pista y comienzo a oír las voces de mis amigos a lo lejos. Se conocen desde hace muchos años y aún así nunca dejan de hablar. Uno me saca quince años, el otro treinta…más o menos. Nos saludamos, dos abrazos bien templados y comenzamos a atrochar. Son las seis y cuarto. Tras tres horas de conversaciones variopintas e historietas batalleras pisando verde, llegamos al cono de deyección del “corredor de la Z”, totalmente nevado. Crampones y dos piolets, arnés y cuerda a la espalda. Comenzamos a subir, voy primero. Tras unos cientos de metros me dicen que baje el ritmo. Cedo mi puesto y me pongo el tercero. Pasan dos minutos y me río por dentro. El ritmo es el mismo. Llegamos a la entrada del corredor , dividida en dos por un pilier central. La huella marca la entrada de la izquierda. La nieve es amable y cruje al ritmo de cuatro por cuatro, desacompasado, de los hachazos de piolets y los puntapiés de crampones. El corredor serpentea encajonándose y ganando ambiente. 40-55 grados. Las huellas de bajada que subimos es una escalera incómoda, el paso es largo. A ratos se pierden bajo viejas coladas de nieve. Seguimos hacia arriba. Bordeamos un zaborro que toca el muro izquierdo. La roca inclina el paso. Está helado , 60º. El piolet se hunde menos pero está seguro, clavamos punta de crampón y el pie está volado. Traccionamos. Pasamos con seguridad y seguimos. Estamos llegando a la salida, unos minutos más y pronto otro abrazo bien templado. Pasamos del afilado y vertical enclaustramiento a un casi sorpresivo horizonte, lejano y ondulante. Las campas blancas de la Partacua deslumbran por el Sol. Escalones y cortados de sombras intensas convierten este terreno amable y bello en un laberinto. Son las 10 y media. Bordeamos la Cima Sin Nombre y nos dirigimos al escalón oeste de Peña Telera. Travesía horizontal con caída. La huella está marcada. El peligro no se siente que acecha con fuerza. Giramos a la izquierda y en diagonal ascendente nos dirigimos directos al escalón. Volvemos a usar los dos piolets. Un pequeño paso en mixto. Dos metros y nos encabalgamos en la corta arista oeste.  Ambiente alpino. A un lado de la arista, patio sin fondo, al otro, la inclinación justa para hacerlo en travesía lateral, con el cuerpo enfrentado a la pendiente. La montaña sigue cuidándonos y la nieve se siente segura. Queda un pequeño paseo hasta la cima. Hay una marmota calentándose junto al hito de hormigón. Son las 12 de la mañana. Cielo azul. 

Hablamos y decidimos. Renunciamos a la canal de Cachivirizas, siempre en sombra y de fuerte pendiente. Mejor Travesía norte-sur de La Partacua. Bajaremos por la vertiente soleada, buscando los pasos que nos permitan llegar a la cabaña del Plan de Usabas y vadear el barranco del Puerto. Bajamos y subimos varios repechos nevados, sorteando un laberinto de fajas hasta llegar al jardín kárstico previo a la cabaña. Entre afilados charcos de piedra crece totalmente regular, como segada, un mar de yerba. Grama de verde intenso y lirios amarillos nos hacen sentir que nos colamos y pisamos un cuidado jardín privado. Se siente como un allanamiento de morada. Pasamos el viejo refugio de Usabas hasta el barranco. Comemos, nos quitamos la sal sudada con agua del torrente y continuamos ligeros, buscando la sombra del bosque que va surgiendo conforme perdemos cota. Aunque duelen los pies, ya llegamos a la entrada del Valle, a Santa Elena. Son las 16:00 h.





Entrada al corredor de la Z. Ampliar imagen haciendo click.



Oscar sube delante. Encontramos tramos con buena huella. 17 de mayo 2025.




Nacho se dirige a la profunda garganta que vamos a escalar. La pendiente es mantenida a 45º. Ampliar imagen haciendo click.

Hay secciones muy empinadas barridas por las avalanchas, tramos muy helados en 50/55º. La huella desaparece y hay que escalar el hielo.




Mantenemos un buen ritmo de progresión. Las cuerdas seguirán en la mochila.


Seguimos ganando altura y superamos la sección más técnica y expuesta. Nieve helada a 60º. Prohibido resbalar. Lo tenemos muy claro.


Salimos al collado en lo alto del corredor. El sol pega fuerte.





Nos dirigimos al Este en dirección a la cumbre de la Peña Telera. Son travesías horizontales por encima del abismo. La cumbre está defendida por un resalte afilado y vertiginoso donde los dos piolets son imprescindible. Caída mortal a los dos lados. No es el momento de hacer fotografías y me parece este tramo más peligroso que el corredor de la Z que acabamos de ascender.




Preparamos los dos piolets y pasaremos con rapidez y determinación.


Después del escarpe helado la cumbre ya está cerca.



Cumbre de la Peña Telera 2.764 m. Seis horas desde Lacuniacha (Piedrafita) casi 1.500 metros de desnivel. Bajaremos por el sur para completar la travesía.


Descendemos hacia el sur por amplias laderas de pendiente amable.




Perdemos altura  buscando unas palas empinadas a 50º para llegar al valle del Puerto de Biescas.



Cruzamos una avalancha y justo debajo está el paso al valle principal. Ampliar imágenes haciendo click.



Cueva de las Grallas en el Puerto de Biescas. Seguiremos bajando por el valle principal ya sin crampones hasta el refugio del Plan de Usabás donde se inicia un buen sendero hasta la capilla de Santa Elena, a mil metros de altitud. En total serán diez horas para subir y bajar. Ha sido una estupenda travesía Norte-Sur por la rotunda y desafiante Sierra Partacua. La nieve estaba perfecta y los hierros han mordido de maravilla. Te queremos Peña Telera!



jueves, 15 de mayo de 2025

BUCARDO DE LOS PIRINEOS BASTA DE MENTIRAS. LORD BUXTON Y LOS CAZADORES ARISTÓCRATAS PERPETRARON SU EXTERMINIO

 

Museo de Historia Natural de Londres. Cabeza de un bucardo cazado por Lord Buxton en 1885, lo que desmiente que no llegó a utilizar las Clavijas de Cotatuero que había mandado instalar a los herreros de Torla en 1881. Foto obtenida del imprescindible libro de KEES WOUTERSEN, "El Bucardo de los Pirineos" editado con la colaboración del Gobierno de Aragón, que acredita la la guerra encarnizada que los aristocráticos cazadores británicos y franceses desataron contra la cabra gigante de los Pirineos. Para el bucardo no hubo compasión. Ampliar imagen haciendo click.


Grabado de carácter propagandístico atribuido a Edward Whymper. alentando a los acaudalados aristócratas cazadores, británicos y franceses, a contratar las expediciones de caza utilizando las clavijas instaladas por Lord Buxton. Del libro "El Bucardo de los Pirineos" de Kees Woutersen. Contemplando la escena, la roca más hermosa del valle de Ordesa, el Tozal del Mallo, que intenté escalar por primera vez a la edad de quince años (1971) Ampliar imágenes haciendo click.


1973 fue mi año de suerte en el Tozal del Mallo. En abril escalé la gran clásica vía Ravier, con Francisco Almenar (Royo) y dos meses más tarde la cuarta ascensión de la magnífica vía de Las Brujas, de Alberto Rabadá, Ernesto Navarro y Juan José Díaz. En la foto tomada por Fernando Orús me distraigo con una revista mientras el jefe del equipo, Francis Thomas, remonta el tramo más difícil de la vía. Nos dividimos en tres cordadas para progresar más rápido. También estaban Valentin Asensio, Bernard Lacaze y Jean Pierre Mermillood, que aparece sentado a mi lado. A la tarde alcanzamos la repisa de vivac y yo propuse superar un enorme techo y dejarlo equipado para el día siguiente. Superado el techo, una maniobra mal ejecutada me puso en peligro de muerte cuando las cuerdas se atascaron y me quedé colgando en el vacío. Me había encordado a la cintura con el nudo As de Guías y comenzaba a asfixiarme ante la mirada estremecida de mis compañeros que nada podían hacer por ayudarme. Pero con diez y siete años uno es un peso pluma y sin pensarlo dos veces trepe a pulso esos quince metros de cuerda hasta llegar de nuevo encima del techo. Esta vez organicé el descuelgue, asegurándome de que las cuerdas no volverían a atascarse. Entonces, jalado por mis compañeros conseguí poner pie en la cornisa de vivac. Todos me abrazaron, y tras una noche que me pasé temblando de frío, conseguimos llegar a la cima antes del mediodía. Francis Thomas nos invitó a comer a todos en Casa Ruba de Biescas.

Pero el Hombre de la Guadaña no renunció a cobrarse su presa. Un mes más tarde recibimos la noticia de que Jean Pierre Mermillood y su compañero, habían sido encontrados muertos al pie del Espolón Walker del Mont Blanc. Ya no vendría a escalar a Riglos como nos había prometido.

El Tozal se apiadó de mi aquella tarde. Hasta una roca gigante sentiría compasión de un joven huérfano que va a morir asfixiado por su propia cuerda, colgado en el vacío bajo un enorme techo. Las paredes de Ordesa siempre me han tratado con benevolencia. Estoy en deuda con esas murallas y sólo puedo devolver esos favores intentando proteger a sus criaturas, los bucardos y los otros habitantes de estas montañas para los que no hubo compasión.

martes, 13 de mayo de 2025

CLAVIJAS DE COTATUERO INUTILIZADAS. CARTELES DE ADVERTENCIA EN LA ENTRADA NORTE AL PARQUE NACIONAL DE ORDESA Y MONTE PERDIDO. BUXTON SÍ FUE RESPONSABLE DEL EXTERMINIO DE LOS BUCARDOS. ELLOS NO DECIDIERON SUICIDARSE EN MASA

 

Carteles advirtiendo que las clavijas de Cotatuero han sido cortadas. Puerto de Bujaruelo 2.273 m, puerta de entrada desde el norte (Francia) al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. 12 de mayo de 2025. Ampliar imagen haciendo click.


Circo de Cotatuero. Ferrata Buxton (1881) cartel de advertencia en el punto más alto de las clavijas. Quienes han colocado esos cables de acero para facilitar el paso de turistas y niños sin acompañar han vulnerado gravemente el Plan Rector de Uso y Gestión del parque nacional en el que las ferratas están prohibidas. Ha sido PRAMES? Ha sido la FAM? Ha sido el propio Parque Nacional? Eso deberán explicarlo ante los tribunales. Ampliar imagen haciendo click.




Subida al Puerto de Bujaruelo 2.271 m. Piolet y crampones.



Nevero helado y peligroso, con caída mortal, que corta el camino entre los circos de Carriata y Cotatuero. El parque nacional ha colocado carteles de advertencia advirtiendo a los senderistas del riesgo de atravesar este nevero. Joven principiante que tenía encomendada la misión de colocar los carteles de advertencia de que las clavijas de Cotatuero habían sido cortadas consiguió franquearlo sin piolet y crampones. Su valor y determinación por salvar Ordesa y los Pirineos fueron más fuertes que el miedo a perder la vida.