Ainielle, medio engullido por la vegetación en la vertiente oeste del Sobrepuerto. Ampliar imagen haciendo click. Nos ha costado tres horas desde Oliván. Apenas se ven las casas y he de retroceder para obtener una fotografía. El escritor leonés Julio LLamazares inventó una ficción que plasmó en su novela "La lluvia amarilla" pero él nunca estuvo en Ainielle. El ibón de Santa Orosia tampoco existe.
Seis kilómetros de pista nevada hasta encontrar un desvío bien señalizado hacia el norte que asciende por la margen derecha orográfica del barranco de Ainielle. Nos acompaña nuestra perra Chucky y un sabueso perdido que nos ha seguido. Pero luego irá dejando un rastro de sangre al herirse en la nieve. Pobre perrete, ya no puede más.
Hemos cogido un atajo incómodo pero muy directo saliendo al buen camino que viene desde Berbusa. El perro perdido se tumba agotado. Avisaremos al dueño para que acuda a llevárselo. La gente del Pirineo adora a sus perros. En "La lluvia amarilla" el protagonista, y único personaje, decide matar a su perra cuando se ve ya cerca del final de su vida en soledad. Pero esto es imposible, e inconcebible, entre las gentes de la montaña. Al contrario, antes de suicidarse un montañes confiaría su perra a una persona de confianza. LLamazares te equivocas. Aquí no tenemos ninguna ocurrencia de matar a nuestros perretes. En León, tu tierra, tal vez se comporten así.
Las huellas no llegan hasta Ainielle. Hay 60 centímetros de nieve. Yo sigo con Chucky hasta la entrada del caserío pero he de retroceder para intentar fotografiarlo. Realmente está escondido el dichoso Ainielle. La excursión necesitaba de raquetas de nieve. Ya no podemos seguir y nos volvemos paraOliván. El descenso estará resbaladizo y peligroso en la pista pisada por los todo terreno de los cazadores. El perro va jodido pero sigue.
Chucky en cambio está en su elemento. Adaptada a la nieve, infatigable en cualquier terreno. Chucky es la perra más valiente de los Pirineos. Ha escalado varias cumbres de tres mil metros en invierno. Aristas, corredores, laderas, peñascos y monte a través. Nada detiene a mi perrita cuya felicidad es acompañarme a cualquier ruta de montaña.
Barranco de Oliván y agua fresquita. Qué rica está y lo bien que nos sienta. 20 de diciembre de 2021. Hoy empieza el invierno. Protejamos nuestra salud manteniendo un estrecho contacto con el medio natural. Somos hijos de la Tierra y nuestra madre es la Naturaleza. Nada que temer. Al contrario, así espantamos la enfermedad.
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